En los años 80 y 90, Chris Oosterom trabajó como programador de cine en diferentes lugares de los Países Bajos. Después de seis años en el Museo de Cine de los Países Bajos, fundó su propia empresa de distribución, primero en Amsterdam y luego en Londres. Desde 2012 es el director del Imagine Fantastic Film Festival de Ámsterdam.